martes, 18 de abril de 2017

Templo de Karnak-Obelisco de Tutmosis I, Sala hipóstila del templo de Amón

El templo de Amón en Karnak, cerca de Tebas, es seguramente el lugar de culto más importante del mundo egipcio. Se encuentra rodeado de una muralla de ocho metros de anchura y de dos Kilómetros y medio de longitud. El faraón Tutmosis I fue el principal impulsor del templo, pero su núcleo inicial se remonta al Imperio Medio. Desde el embarcadero del Nilo se accede por una avenida flanqueadas de esfinges con cabeza de carnero, animal sagrado de Amón, que protege entre sus garras la figura sagrada del faraón y el rollo de Ramsés II. Al final de la avenida de esfinges se llega a un gran patio, desde el cual accede a la gran sala hipóstila con 134 colosales columnas y con muros decorados que narran las victorias del faraón Seti I y de Ramsés II.
Después encontramos el obelisco de Tutmosis I y una serie de patios  entre lo que se encuentra el santuario de la vaca sagrada y la gran sala de la fiesta de Tutmosis III. A todo este espectacular conjunto hay que sumar una serie aún mayor de dependencias de todo tipo y el gran lago sagrado, espejo de agua enormes dimensiones, reflejo callado del poder del templo.


Sala hipóstila del templo de Amón de Karnak ( Egipto ). Sala con columnas a la que se accede por un gran patio y que procede a otra rectangular. A partir de este esquema básico los templos egipcios se amplían añadiendo patios y más salas hipóstilas.

 Templo de Karnak-Obelisco de Tutmosis I, Sala hipóstila del templo de Amón


EmoticonEmoticon